Me alojé en Riad Zara Maison d'Hôtes durante mi viaje a Marrakesh y encontré dos aspectos positivos destacables. En primer lugar, la ubicación del hotel es muy conveniente, ya que se encuentra a solo 6 km del aeropuerto más cercano. Esto fue perfecto para mí, ya que solo necesitaba un lugar para pasar la noche mientras hacía escala en mi viaje. Además, descubrí que el hotel también está a una distancia razonable de Marrakesh, a solo 4,6 km. Esto me permitió explorar la ciudad de manera fácil y rápida.

Debo mencionar un pequeño inconveniente durante mi estancia en Riad Zara Maison d'Hôtes. Aunque la ubicación del hotel era conveniente para mí, me di cuenta de que se encontraba en un barrio inseguro.

Durante mi viaje a Marrakesh, decidí hacer una breve parada en Riad Zara Maison d'Hôtes debido a su conveniente ubicación cerca del aeropuerto. Esto facilitó mi tránsito y me permitió ahorrar tiempo en mis desplazamientos. Además, el Riad se encuentra a poca distancia de Marrakesh, lo que me brindó la oportunidad de explorar la ciudad durante mi estancia.

Debo mencionar que encontré algunos aspectos negativos durante mi estancia en Riad Zara Maison d'Hôtes. Una ligera molestia fue el suelo sucio de mi habitación, que no cumplía con los estándares de limpieza.

Nos encantó alojarnos en este riad en Marrakech. Monique, la dueña, fue súper amable y nos dio todos los consejos para disfrutar al máximo. Las habitaciones eran preciosas y el desayuno en la terraza fue genial. Además, el riad está cerca de un campo de golf, lo cual fue genial para pasar un rato divertido con nuestros amigos.

Lo único que podríamos pedir es que el riad tuviera alguna actividad nocturna para jóvenes como nosotros. ¡Nos hubiera encantado tener un lugar donde bailar y pasar un buen rato durante la noche!

El personal fue bastante amigable y complaciente y ayudó con el parking público. Me alojé en una habitación muy bien amueblada y enorme con un baño.

No quería salir de allí.

No tengo ninguna pega, 100% recomendable, me ha gustado todo. Una habitación climatizada, el hotel en sí tradicional y un personal servicial. Ubicación: el hotel estaba justo al lado de las montañas, de la plaza del centro, del centro. En general, la comida estaba buena; el Argane Tichka Restaurant estaba en las cercanías. Habitaciones con un baño. El desayuno era delicioso y había una enorme variedad de variedad.

El alojamiento me ofreció una experiencia auténtica y encantadora, como sacada de un cuento de las mil y una noches. La dueña fue muy amable y nos brindó valiosos consejos para explorar la ciudad. Además, el desayuno incluido fue delicioso y lo disfrutamos en una maravillosa terraza o en un hermoso patio.

Aunque la ubicación del hotel era un poco alejada de la plaza y los zocos, la dueña nos brindó instrucciones claras para evitar perdernos. Sin embargo, la falta de privacidad y la falta de luz en las habitaciones fueron puntos negativos.

El hotel era un buen sitio para, además gozaba de una zona tranquila, cerca de la plaza principal, de las montañas. El desayuno en el patio era sabroso. Habitaciones con un baño.

La limpieza del hotel es impecable y las habitaciones son muy cómodas. El desayuno que se sirve aquí es delicioso y ofrece una gran variedad de opciones.El personal del hotel es amable y servicial, siempre dispuesto a ayudar en todo lo que necesites.La ubicación en la antigua medina es perfecta para explorar esta encantadora ciudad.

No puedo quejarme de la propiedad de ninguna manera.

Buenas habitaciones

Propia casa. Terraza buena.Desayuno exquisito.Decoración bonita y auténtica.Atención de la dueña.Cenas excelentes.Buena ubicación

Me gustó todo.

El hotel se encontraba muy cerca de la plaza principal, de los taxis y también de la fuente. Comí en el patio. La cama era cómoda, la habitación enorme y muy bien amueblada, con un baño.

La terraza en la azotea ofrece una vista magnífica de la ciudad y sus zocos. Me sentí como un pájaro disfrutando de la vista panorámica de Marrakech.

El riad está un poco alejado del centro de la medina, lo que puede hacer que la vuelta sea a través de calles más pobres e inseguras.

El hotel es un remanso de paz en medio del bullicio de la antigua medina. La decoración auténtica y cuidada nos hizo sentir como si estuviéramos en un lugar sacado de las mil y una noches. Además, la atención y amabilidad de Monique, la dueña, fue excepcional. Nos guió por las estrechas calles de la medina para que no nos perdiéramos y estuvo siempre pendiente de nosotros. disfrutamos de deliciosos desayunos y cenas en el hotel, con una comida exquisita en un precioso patio. Sin duda, este hotel nos brindó una experiencia maravillosa.

Todo estuvo perfecto.

Lo he reservado muchas veces y recomiendo este lugar insistentemente. He pasado un tiempo realmente bien, me ha gustado mucho el hotel. Ubicación: el hotel estaba en las proximidades de la plaza principal y también de la fuente. Comimos en Dar Najat's Kitchen, que está relativamente cerca del lugar.

La ubicación es perfecta! Está situado en el corazón del casco antiguo, a solo unos minutos a pie de la Plaza Jema el Fna. Además, se encuentra en una zona tranquila y menos turística, lo que te permite sumergirte en la auténtica vida de la Medina. me encantó la decoración auténtica del Riad, que te transporta a la esencia de Marrakech.

No había caja fuerte en la habitación para guardar mis objetos de valor de forma segura.

Atención y servicios extraordinarios

Limpieza y organización impecables. Seguridad en todo momento.- Recomendaciones y consejos útiles.- Ubicado en plena medina.- Fácil movilidad por la ciudad.- Ayuda de Monique, una mujer con experiencia en Marrakesh.- Mapa detallado de lugares interesantes, restaurantes y transporte

No hay nada negativo.